El XIX mensaje de la Comisión Internacional de Misión Marista, titulado “Espiritualidad en la misión y misión en la espiritualidad”, invita a todos los implicados en la misión marista a vivir, expresar, integrar y alentar la espiritualidad en cada aspecto de sus acciones. Y promueve “que todos los espacios de misión transpiren y faciliten una experiencia espiritual vital, contemporánea y marista que permita a todos un contacto real con el Espíritu de Dios y el Evangelio, vivos y presentes”.
El mensaje, elaborado por el H. Francis Jumbe, en nombre de la Comisión Internacional de Misión Marista, recuerda que la “espiritualidad está íntimamente conectada con nuestra tradición cristiana y marista”. Y hace hincapié en dos aspectos fundamentales de la misión: “Dar a conocer y amar a Jesucristo” y ayudarles a ser “buenos cristianos y virtuosos ciudadanos”, dado que la misión de las obras maristas es “ayudar a los niños y jóvenes a tener una experiencia de humanidad, de fe y de vocación”.
El texto destaca la necesidad de desarrollar la espiritualidad y la interioridad como parte de un modelo educativo transformador y contemporáneo en las obras educativas: “En los programas de formación marista, la dimensión espiritual desempeña un papel muy importante y está íntimamente unida a la identidad institucional. Nuestros programas de formación respetan a la persona humana, fomentan la solidaridad y crean oportunidades para experimentar un sentido de trascendencia”.
El documento, valora las acciones que ya se están llevando a cabo para vivir la espiritualidad marista, pero considera que “todavía necesitamos más espacio para asegurar que los valores de la Segunda Llamada del Capítulo General nos ayuden a vivir una espiritualidad en profundidad que transforma la vida (tales como profecía, misericordia, fraternidad, interioridad, vida cotidiana, alegría, inclusión, plenitud, testimonio, unidad, etc.)”.
El mensaje plantea la importancia de “seguir facilitando programas regulares de formación sobre espiritualidad e interioridad para educadores, niños y jóvenes y el personal”, y pide que “todos los maristas de Champagnat (hermanos y laicos), seamos conscientes y coherentes en nuestra manera de vivir la espiritualidad marista”.
A través de este XIX mensaje, la Comisión Internacional llama a todos los Maristas a vivir hoy proféticamente la misión y destaca que “somos un Instituto apostólico. Buscamos facilitar el encuentro con Dios y con el Evangelio por parte especialmente de los niños y jóvenes. Estamos convencidos de que ese encuentro es transformador y profético, significativo y liberador”.
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